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martes, 17 de junio de 2008

Días de balance.

En todo este tiempo que estuve sin aparecer se me amontonaron muchísimas cosas por contar.

Los primeros dientitos

Para empezar Germán ya cumplió sus ocho meses y le salieron sus primeros dientitos de leche. El 6 de mayo vio la luz el primero de ellos. Fueron días muy difíciles, mucha baba, dolor, nervios y llantos.

A todo le clavo los dientes

Germán de estreno

Como ya somos grandes dejamos la cuna de chiquito para pasar a una más grande. La trajeron toda desarmada y hubo que esperar a papá, que con toda su habilidad manual la armara. La alegría de Germán cuando la vio toda armadita fue sorprendente, ¡Que emoción!

Días de tristeza

Por estos días estamos muy tristes porque falleció una tía de Maty. Además de ser una mujer y mamá muy joven, era una persona extraordinaria. Nunca conocí a alguien que ante tanta adversidad, como le tocó vivir, tuviera tanta fortaleza.

Los primeros achaques

El viernes 6 de junio fuimos de la pediatra a una consulta de rutina, nos venía barbaro porque Germán traía un resfrío bien fuerte desde hacía unos cuantos días. Cuando la doctora lo revisó diagnosticó bronqueolítis y que tenía broncoespasmos. Saliendo del consultorio compramos la medicación y a casita. Pero ahí no terminó todo, a eso de las once de la noche notamos que le costaba respirar y que se ahogaba. Obvio, salimos corriendo para la guardia de la Suizo. Llegamos y tenía 39° de temperatura, una otitis que se formó entre la consulta de la doctora y la guardia, la bronqueolítis y un fuerte broncoespasmo que le estaba provocando taquicardia. En fin, terminamos internados hasta el sábado por la tarde porque tenía requerimiento de oxígeno.
Luego vinieron los sucesivos controles día por medio y es to hizo que tanto ir y venir a la clínica se contagiara una gastroenterocolítis. No se imaginan la cantidad de pañales, algodón y óleo calcáreo gastamos en estos días. Y como no hay dos sin tres hizo un brote a raíz de lso cuadros virales anteriores.
La doctora nos comentó que los chicos se pescan entre 12 y 14 pestes por año, llevamos 4, ¡Uff! no quiero pensar lo que nos espera.

Un poco de oxigenoterapia

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