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domingo, 6 de mayo de 2012

Proyecto Maternidad Comprometida. Día 6. Caprichos



Con este tema tengo tela para cortar por un buen rato.
Germán es un niño muy dulce, cariñoso, inteligente, pero un tanto caprichoso.
El tema de trabajar los caprichos es un trabajo de todos los días, de ponerle límites, pero respirando hasta 10 para no acogotarlo.
Cuando Germán comienza con algunos de sus berrinches es muy dífícil conversar con él o hacerlo razonar. Por ejemplo los típicos caprichos que se pueden escuchar son: "no quiero que papá coma, quiero que primero juegue conmigo", "no quiero que papá hable con vos... no quiero que tomen mate... quiero jugar al ludo, al ping pong", llega el papá y Germán se transforma.
Hace poco estabamos en el cumpleaños de su primita y cuando llegó su papá empezó con el mismo cantito de siempre. Primero le explicamos que su papá llegó cansado del trabajo y después que comiera y descansara algo jugaría con él. ¿Qué creen? no resultó, Germán no te la va a hacer fácil a la primera. Luego intenté hablandole a solas en otra habitación pero como tampoco funcionó entonces tomé mis cosas, lo abrigué y ante la mirada atónita de algunos me fui con él y se quedó sin cumpleaños. No crean que esto fue fácil, me dolió muchísimo, pero creanmé que ayer estando en otro cumple al llegar su papá lo saludó y siguió jugando.
Los 10 días de Maternidad comprometida está organizado por Soy Mamá Blog y cuenta con la destacada colaboración de mamás blogueras. Sigue nuestro proyecto en Facebook, Pinterest, and Twitter. Y, por supuesto, cada foto de la participante te lleva a su blog o cuenta de Twitter, en donde encontrarás su forma de vivir la #maternidadcomprometida

11 comentarios:

Unknown dijo...

Siiii los Caprichos son un trabajo diario, pero creo que estuvo super bien como manejaste el episodio del cumpleaños, se que duelen esas medidas pero como dicen aca en México mas vale una pinta que mil descoloridas.

Viviana dijo...

Y si mujer!!! Hay que buscarles la vuelta, si no, todo se convierte en un caos !

Me imagino que a los dos le dolió irse del cumple, pero se ve que aprendió!

Hola. Somos Nancy y Matías. dijo...

Mientras volviamos en viaje yo me iba sintiendo cada vez peor, con mucha angustia, pero llegados a casa le hice la pregutna de si sabía qeu se había comportado muy mal y dijo: si ma.
El haber contado con el apoyo de Maty en ese momento también ayudó mucho a que me mantuviera firme.

Ana Laura De Romero dijo...

Es que hay q ser firmes también, de nada les vale q los "amenacemos" y a la primera de cambios nos derretimos y no cumplimos nada, sabes yo también pregunto, entendiste porqué no se te permitió tal o cual cosa... tampoco quiero q crean q es imposición arbitraria XD

Anna dijo...

ay, sí, lo de los caprichos es un trabajo de hormiga como decimos, poquitito a poco...
un gusto leerte!

Juany Almaguer dijo...

te confieso que mi esposo es quien controla esas crisis, pues aunque mis hijos ya estan grandes (17;12 y 9) aun los siguen haciendo. Yo me impaciento y la mayoría de las veces termino enojada con ellos, asi es que mejor prefiero que él entre al quite

Anónimo dijo...

Esto de manejar caprichos y berrinches es tarea de 2 si el papa no ayuda todo se viene abajo, justo hable eso con mi esposo hace rato. Pero que bueno q tu peque reconoció que se Porto mal eso es un gran paso. No nos queda mas que tener paciencia!

Unknown dijo...

que dificil!..confieso que yo tambien me desespero mucho mucho!..pero la tecnica que aplicaste me encanto, creo que tomare nota :P

Jazmín dijo...

Me encanta eso de que tu esposo te apoyo, eso es lo ideal, es medio complicado ponerse de acuerdo, pero siempre es lo mejor, aveces yo cedo muy fácil, pero cuando mi esposo dice No, yo lo apoyo, el problema es cuando yo digo que si antes y después a él no le queda de otra que apoyarme. Debo seguir tu ejemplo, no me falta firmeza, cuando digo que no, es no, pero mi problema es que casi siempre digo SI.

Hola. Somos Nancy y Matías. dijo...

Debo reconocer que son más fáciles de manejar los caprichos de mi hijo de 4 años que los de la de 17. A esa le daría una garrotera que ni les cuento jajaja. 1, 2, 3, así conté la última vez y me alejé.

Unknown dijo...

Es bien difícil el tema de los caprichos, igual así como tú una vez me fuí de una fiesta porque no paraba de llorar (no recuerdo la razón) pero en ese momento fué la única solución que encontramos =(